Domingo Sexto del Tiempo Ordinario (Ciclo B)

Día 12 de Febrero

SEXTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO (CICLO B)

EVANGELIO DEL DÍA

(MARCOS 1,40-45)

"En aquel tiempo, se acercó a Jesús un leproso, suplicándole de rodillas:

-Si quieres, puedes limpiarme.

Sintiendo lástima, extendió la mano y lo tocó, diciendo:

-Quiero: queda limpio.

La lepra se le quitó inmediatamente, y quedó limpio.

Él Lo despidió, encargándole severamente:

-No se lo digas a nadie; pero, para que conste, ve a presentarte al sacerdote y ofrece por tu purificación lo que mandó Moisés.

Pero, cuando se fue, empezó a divulgar el hecho con grandes ponderaciones, de modo que Jesús ya no podía entrar abiertamente en ningún pueblo; se quedaba fuera, en descampado; y aun así acudían a él de todas partes". PALABRA DEL SEÑOR.

REFLEXIÓN

En el evangelio de este sexto domingo, Jesús cura a un leproso que se acerca a Él. Es un gesto prohibido. Los leprosos han de vivir solos, fuera del campamento. Así lo manda la Ley. Venciendo el decreto, aquel hombre se arrodilla ante Jesús y le suplica: "Si quieres, puedes limpiarme". Un gesto y unas palabras que expresan un deseo. La respuesta de Jesús es admirable en su paralelismo: un gesto y unas palabras eficaces. Extiende la mano, toca al leporoso, y dice: "Quiero: queda limpio". Jesús hace que cambie la vida de aquel hombre. se ha compadecido de él. Todo será nuevo a partir de esos gestos, palabras y sentimientos.

La enfermedad, es un signo de debilidad, y Jesús a venido, precisamente para los pobres, los débiles, los enfermos: "No necesitan médicos los sanos".

Hoy, puedes buscar el parelismo entre este gesto de Jesús, y los múltiples gestos de nuestro mundo actual, para mí el parelismo es evidente y además tremendamente acusador. ¿Quién te parecen que son los leprosos de hoy?. ¿Los hambrientos, los pobres sin nada, los parados, las familias desahuciadas, echadas de sus casas por los ricos?.

LA SALUD, DERECHO DE TODOS:

¡ACTÚA!

Este es el lema de la campaña de Manos Unidas 2012 que celebramos hoy. La enfermedad es para el hombre una de las causas principales de dolor y sufrimiento, creéme, te lo digo con conocimiento de causa. Las distintas culturas antiguas entendieron la enfermedad como un castigo para el hombre. Ante el caso del ciego de nacimiento, le preguntan a Jesús: ¡Señor! ¿Quién pecó, éste o sus padres, para que naciera ciego?.

Cristo Jesús, sale al encuentro del hombre solo en su enfermedad para llevarle a la comunión con Él y devolviéndole así a la comunión con los hombres, La Iglesia está hoy llamada a luchar contra la enfermedad, haciendo presente a tantos enfermos eol consuelo del Amor.

Al final se nos juzgará en el amor: "Estuve enfermo y me visitaste...".

Tomás García Torres